22 de Diciembre de 2025
Director Editorial Lic. Rafael Melendez | Director General - Dr. Rubén Pabello Rojas

40 años vendiendo pavos para la cena navideña

Elizabeth Aviña/Coatzacoalcos, Ver.

La venta de productos para la cena de navidad es una tradición que une a las familias en las fiestas decembrinas, por ese motivo y desde hace más de 40 años, Josefina del Carmen Vázquez Ambrosio, vende pavos a las afueras del Mercado Morelos.

La vecina de la colonia Miguel Hidalgo, se ubica en el camellón de la avenida Juárez desde el primer día 17 de enero y se retira hasta el 31 de diciembre a las 16:00 horas.

“Yo pago cada año 300 pesos por el derecho de piso y para poder vender mis productos, la verdad es que la venta ha estado baja pero luego hay gente que viene de última hora y ya con eso la hacemos”, dijo.

La comerciante comentó que este año trajo 10 pavos y una cantidad mayor de gallinas, los precios de los pavos oscilan entre los 600 y mil pesos, mientras que las gallinas pueden ser adquiridas por al menos 150 o hasta 200 pesos según el tamaño.

Estos animales son traídos desde otros sitios como San Juan Evangelista, Barrillas y hasta de Pajapan, pues en estos sitios las personas se encargan de engordarlos y cuidarlos para tenerlos listos en temporadas de fiestas.

“Yo se los compro a otras personas pero a veces también los crio, en los ranchos nos venden los animales hasta en mil pesos y nosotros tenemos poca ganancia, las personas nos regatean pero no saben todo lo que pasamos nosotros por querer llevar un dinerito a la casa”, aseguró.

Vázquez Ambrosio trae los pavos hasta el centro de Coatzacoalcos en costales porque luego los taxistas no quieren subirla.

Posteriormente quienes compran su producto deciden si lo quieren vivo o muerto.

En caso de quererlo muerto, ella ata las gallinas o los pavos a un árbol, ahí les corta el cuello y finalmente los entrega para que los dueños los desplumen en su casa, o en su caso, si el comprador quiere la sangre del animal para consumo, ella les prepara un chile, hierva buena y cebolla picada para que hagan moronga.

Un pavo de 10 kilos puede alcanzar para que lo consuman 20 personas, los pavos que ella vende pesan entre 4 y 10 kilos, según la necesidad del cliente.

“La verdad estoy esperando que la gente salga porque luego hacen sus compras de última hora, además a muchos no les gusta de las tiendas porque es un producto que viene congelado, muchas veces nos compran más los pobres que los ricos porque los ricos luego les da asco estar desplumando y haciendo la preparación necesaria para que la cena quede muy rica, en cambio los

pobres ahorran todo el año para poder tener una buena y rica cena la noche de navidad”, puntualizó.


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