Aguas negras contaminan pozos artesianos
Por: Anthon ovando
Poza Rica.- En un verdadero ecocidio viven los vecinos de la colonia Ignacio de la Llave, debido a que desde hace varios años la red de drenaje se encuentra azolvada, provocando la conformación de una enorme laguna y la descomunal contaminación a sus alrededores.
Más de cuatro mil familias padecen esta problemática, donde cerca de mil 500 tienen una gran contaminación en sus pozos artesianos, y que es la única fuente para adquirir el vital líquido, pues manifiestan que desde hace 30 años no cuentan con el servicio de agua potable.
Gerardo Chávez, integrante del Comité Vecinal, aseguró que el ecocidio fue provocado desde hace varios años, cuando la empresa Nalpe realizaba trabajos de construcción sobre el puente Cazones Bis, obstaculizando el cauce natural de la red pluvial.
“Tenemos con este asunto desde el trienio pasado; nosotros mandamos un oficio a la compañía, pero no tuvimos respuesta; esta colonia padece la contaminación de sus pozos, el agua sucia se filtra, hay malos olores y es una situación muy grave”, dijo Chávez.
Los vecinos están hartos de este escenario, ya que los fétidos olores son constantes, principalmente en temporada de calor; en ocasiones han tenido que pagar mano de obra para desaguar los fluidos hacia el río Cazones.
María del Consuelo Garcés Juárez, presidenta de la colonia, explicó que todos los drenajes terminan en la “laguna”, ya que no existe una salida del agua, porque las rejillas fueron taponadas por los trabajos de excavación del mencionado puente.
“Quedamos en un hueco, por así decirlo; estamos allí con más riesgo que antes, somos más de cuatro mil familias afectadas y cerca de mil 500 de las calles aledañas; en la calle Juan de la Luz Enrique ya presentan un grave problema de contaminación y salud”, apuntó Garcés Juárez.
A decir de los vecinos, la problemática pudiera ocasionar futuras inundaciones, en las próximas temporadas de lluvias, por lo que piden a las autoridades municipales que tomen cartas en el asunto para lograr el desfogue de las aguas nauseabundas sobre el cauce del río Cazones.
