Fidel Morales Alonso, agente municipal segundo de la congregación Acalapa 2, Kilómetro 17, del municipio de Moloacán, quien en ausencia del agente municipal titular, Domingo Machuca, se encarga de llevarnos hasta el lugar donde brota el líquido hirviendo con otras sustancias, explica que un primer brote sucedió el 4 de enero, mismo que fue hecho del conocimiento de las autoridades al día siguiente.
La primera versión que corrió en boca de los lugareños es que se trataba del nacimiento de un volcán, pero las características del fenómeno no son las que corresponden a un proceso volcánico.
Al lugar han acudido autoridades de los municipios aledaños, el diputado Renato Tronco, el presidente municipal de Moloacán, periodistas, especialistas de Pemex, Sector Cinco Presidentes, Las Choapas y Cuichapa, de la Universidad Nacional Autónoma de México y curiosos.
ARDUO RECORRIDO
Desde el poblado Acalapa 2 hasta el lugar exacto del brote se deben recorrer aproximadamente dos kilómetros a pie, por veredas estrechas y salvando alambrados de púas. Quien no está acostumbrado a ese tipo de recorridos la distancia se hace eterna, sobre todo porque no es terreno plano, sino que se debe subir y bajar lomas, sumando a eso que durante la visita de El Heraldo, la lluvia dejó resbaloso el camino, con mucho lodo.
Un segundo brote de aguas calientes ocurrió el lunes 20 de enero, aproximadamente a ocho metros del primero y justo al lado de un pequeño arroyo al que llaman El Salado, que aunque no es propiamente de aguas saladas, ahora se contamina irremediablemente con lo que brota junto con el agua caliente.
Morales Alonso comentó que los especialistas levantaron muestras del producto que emana para realizar el estudio que determine qué es lo que sucede en el subsuelo.
PIDEN RESULTADOS
Señaló que el pueblo de Acalapa 2 pide al gobierno que se entregue el resultado del estudio lo más rápido posible, pues la gente está atemorizada, porque no sabe que es lo que ahí está pasando, pero no dudan que brota algo tóxico, pues ha matado peces, guabinas y tortugas en los arroyos que ha contaminado, un lugar que se llama Pajaral y va rumbo a Las Choapas.
Agregó que el ganado no puede beber esta agua porque está contaminada, está muy salada.
Hasta la fecha no han recibido ningún informe y piden al Gobierno del Estado que se agilice para saber qué es lo que brota del subsuelo, pero no han obtenido respuesta alguna; sin embargo, el mismo agente municipal segundo no se atreve a asegurar que se trata de un volcán.
El área donde brota el líquido hirviendo ocupa aproximadamente seis metros cuadrados, la vegetación que rodea al lugar ha muerto.
HULE A PETRÓLEO
Un olor característico del petróleo crudo sale junto con los vapores, se puede apreciar el burbujeo del líquido hirviendo y cuando escurre por la ladera del cerro se cristaliza casi inmediatamente.
Fidel Morales se atreve al pasar el cerco, hecho de alambre de púas, donde se colocó un letrero hecho en cartulina que dice: “Prohibido el paso por tu seguridad. Protección Civil”.
El agente segundo recoge una muestra del líquido y levanta algunas rocas, que son parte del líquido ya cristalizado, luego mete una vara de casi tres metros de longitud, con fuerza la empuja por el agujero donde está el brote y se pierde en la profundidad.
Explicó que en el primer brote se le introdujo una vara de 14 metros, pero no se le encontró fondo, “esto viene de muy debajo de la tierra y no se sabe qué profundidad tenga”, señaló.
