* El comerciante debe elegir a la empresa que verificará la calibración de sus básculas
Rocío Ramírez
En la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), comerciantes en general y algunos agremiados han reportado la visita de las Unidades de Verificación Acreditadas (UVA), de tal manera que hacen sentir al comerciante que es una obligación realizar la verificación por parte de dicha empresa.
Olivia del Consuelo Flores de la Torre, secretaria del consejo directivo de la Canaco y Servytur de Martínez de la Torre, Informó al respecto que han llegado quejas de comerciantes martinenses, pero principalmente de comerciantes de Tlapacoyan, ya que se ven intimidados por empresas autorizadas para la realización de la verificación de sus básculas.
Expresó que hay mucha gente que desconoce tal información, por lo que algunos comerciantes han caído en chantaje o en intimidaciones, dijo que deben elegir lo que más les convenga y no dejarse manipular.
“Por la ignorancia sobre el tema muchos comerciantes se ven intimidados por alguna empresa, pero si las reportan se les puede retirar el permiso, ya que abusan del poder que se les da”, citó.
Indicó que los comerciantes ya sean agremiados o no, pueden acercarse a la Canaco o bien a Profeco para denunciar ese tipo de situaciones.
“En Martínez son pocos los que han reportado, pero en Tlapacoyan son muchos comerciantes que se quejan, a los cuales si hubiese una oficina de Profeco en el municipio se les facilitaría y no solo a ellos, también a comerciantes de Tlapacoyan, San Rafael, Misantla y los alrededores”, informó.
Explicó que la Ley Federal de Protección al Consumidor establece que es una obligación del comerciante contar con la verificación correspondiente, pero en caso de que los comerciantes no hayan realizado su verificación de báscula, es recomendable que se junten entre varios para solicitarle a una empresa autorizada la verificación y así les convenga a los comerciantes realizar el pago.
“No permitan que personas que tienen autoridad los amedrenten y sean objeto de estafa o fraude, los comerciantes deben decir qué UVA les puede realizar el servicio, chequen en internet o hablen a los teléfonos de Profeco para que les asesoren, o bien acérquense a la Canaco para que se les brinde información”, citó.
Aclaró que los comerciantes tienen la obligación de realizar una verificación anual a sus básculas del 1 de enero hasta el 31 de mayo, y posterior a dicha fecha se debe realizar por medio de una unidad de verificación acreditada de su elección.
“A partir de 1 de junio Profeco en el departamento de verificación podrá realizar la certificación de que todas las básculas están realmente verificadas, se puede hacer con Profeco o con las UVA, las cuales están autorizadas por la Secretaría de Economía y si bien es un servicio particular, el comerciante tiene la autonomía para decidir si contrata alguna de esas empresas o se queda con Profeco”, detalló.
Los comerciantes han sido intimidados en alguna ocasión
Comerciantes han reportado que en Tlapacoyan y Martínez de la Torre algunas Unidades de Verificación Acreditadas (UVA), de las cuales han llegado a intimidar o presionar a los comerciantes para la verificación de sus básculas.
Expresan, que al no haber en el municipio una oficina de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), no hay verificadores directamente de Profeco, sino que hay empresas autorizadas que pueden realizar el servicio, pero la molestia es que existen verificadores que presionan e intimidan a comerciantes para calibrar sus básculas.
“En una ocasión vinieron a verificar mi báscula por parte de una empresa autorizada por Profeco, pero la persona encargada me dijo que si no lo hacía en ese momento me haría acreedor a una multa, ya que no contaba con el holograma reciente, pero le dije que no estaba el patrón, porque la verdad lo estaba exigiendo”, expresó comerciante de Tlapacoyan.
La misma situación reportan que sucede en el municipio, pero algunos comerciantes han aceptado por temor a tener que hacerse acreedores a una multa.
“Ya cuento con la certificación por parte de una empresa autorizada, la acepté porque no quiero pagar multas, llegaron diciéndome que tenía que dejar que hicieran la verificación con ellos porque si no la Profeco me iba a multar”, citó Lidia García, comerciante martienense.
Comentaron los mismos comerciantes, que algunos de los verificadores no especifican que son empresa privada autorizada y hacen pensar que son trabajadores de Profeco.
Por su parte Profeco explica
Ante esto, la Procuraduría Federal del Consumidor ha recibido reportes en otras ciudades de que verificadores presionan y chantajean a comerciantes para calibrar sus básculas, así lo informó en diversos medios el delegado de Profeco, Rodolfo Guerrero García, quien detalló que se han recibido más de 25 quejas en lo que va del año.
Se explica que las Unidades de Verificación Acreditadas son organismos de certificación, laboratorios de prueba de calibración y unidades de verificación reconocidos por una entidad mexicana de acreditación (EMA).
Dejó claro que estos verificadores son autorizados por la Profeco, mismos que ofrecen la calibración autorizada por la misma dependencia, sin embargo, los comerciantes pueden decidir hacerla o no, ya que el realizarlo implica un gasto mayor.
“El costo que ofrece la Profeco para calibrar sus básculas es de 230 pesos por unidad, y los verificadores cobran entre los 300 a 400 pesos por cada instrumento de medición”, informó.
Aseveró que muchos de estos verificadores se hacen pasar por trabajadores de la Profeco, cuando los verificadores de la dependencia no están autorizados para recibir dinero por dicho servicio, ya que primero se hace una solicitud de calibración y el costo se tiene que depositar a una cuenta bancaria.
Se explicó que de encontrar irregularidades solo Profeco puede imponer sanciones como multas, ante esto el personal de Profeco que se requiera en los comercios deberá portar gafete credencial de verificador y documento de orden de verificación.
Expresó que de acuerdo a la Ley Federal de Protección al Consumidor, las verificaciones se realizan del 1 de enero al 31 de mayo mediante Profeco, en los siguientes meses las UVA sí pueden realizar esto sólo a petición de los comerciantes y por su voluntad a partir del 1 de junio en adelante.
