Personas de diferentes estratos sociales, una vela encendida en la mano, iniciaron esta actividad con un Padre nuestro pidiendo por los secuestradores, para que Dios les dé razón y se alejan de esa actividad.
El arquitecto Oliverio González, representante responsable del Movimiento Nacional Liberación, informó que el acto es organizado por Católicos de Coatzacoalcos, pero la idea es que sea abierto a todos, creyentes, no creyentes y de otras identidades religiosas.
Dijo que se trata de un gesto que nace a partir de los actos de violencia que se han desatado en nuestro país, nuestro estado y nuestra ciudad.
La situación que prevalece en el país ha llevado a que un grupo de laicos, comprometidos con su fe y su Iglesia, decidieron hacer un gesto sencillo, pero lleno de certeza que es el Santo Rosario.
Señaló que la invitación es abierta a todos, creyentes y no creyentes, para que a través de este gesto se manifieste unidad y comunión por la paz de nuestra ciudad.
Explicó que este es el primero de varios eventos similares y cita a los participantes para el próximo lunes 24 de febrero, a la misma hora y en el mismo lugar, se hará el segundo rezo por la paz de México y Coatzacoalcos.
“Pedimos a la gente que se una y se haga sentir, que este es un momento de protagonismo para los ciudadanos, hacemos un llamado a las autoridades para que hagan su trabajo y cuiden de la ciudadanía y les decimos que también estamos pidiendo por ellos”, dijo.
Comentó que desde la semana pasada comenzaron a hacer la invitación en parroquias y a través de las redes sociales.
Enfatizó que se puede ver una respuesta positiva, agradeciendo que la gente tenga el valor de salir a manifestarse, sobre todo en paz y en comunión
Señaló que no se había hecho algo así en la ciudad, pero nunca es tarde, aunque reconoció que la gente tiene mucho miedo y prefiere estar en silencio, o que es indiferente.
Previamente se dieron instrucciones a los participantes, para que el movimiento fuera en orden y evitar que el parque quedara con alguna basura, se invitó a que los desechos se depositaran en las bolsas que habían llevado.
Momentos después, iniciaron con un Padre Nuestro que cimbró el parque Independencia.