Tecolutla, Ver.- (AVC) Las vedas, la falta de apoyos a los pescadores y la contaminación que generan las empresas que están asentadas en la cuenca baja del río Bobos, han sido factores determinantes en la crisis e, incluso, en la quiebra económica que viven actualmente la mayoría de las cooperativas pesqueras que se encuentran asentadas en municipios como Tecolutla, Nautla y otros del norte del estado.
Según lo expresado por el señor Samuel Soto Guillen, secretario de la Sociedad Cooperativa de Pescadores de Casitas, en la actualidad casi todas las sociedades de pescadores operan con números rojos y sólo algunas mantienen su economía porque desde hace algunos años han estado comercializando productos, de río y mar, que son traídos a Veracruz desde el estado vecino de Tamaulipas, el cual prácticamente se ha apoderado de los mercados locales.
En entrevista, don Samuel señaló que la contaminación diaria que generan algunas empresas como la procesadora de jugos Citrofrut, no sólo ha paralizado y disminuido la reproducción de especies, sino que también ha acabado con las cooperativas y con la fuente de empleo de cientos de pescadores que, hoy, se ven obligados a emigrar o a emplearse en cualquier otra actividad que les permita obtener recursos para poder mantener a sus respectivas familias.
“Antes, esta comunidad era envidiable, tenía mucho ostión y su cooperativa era de alrededor de 50 socios, de los cuales ya nada más quedan 12; no hay créditos para nosotros, y si los hubiera, pues ya no tenemos pescado ni siquiera en la playa, esa es la realidad de los pescadores de esta zona, por eso casi todos los negocios y algunas cooperativas tienen que recurrir a los productos de río y mar que se traen de Tamaulipas”, explicó el entrevistado.
Al cuestionarlo sobre el tipo de mariscos y peces que ya no se capturan aquí y que, por consecuencia, tienen que acarrear de otros lados, Samuel Soto señaló que en esta zona lo que se compra es el robalo, camarón (en todas sus variedades), sierra, jaiba, huachinango, entre otros, que hasta hace aproximadamente 10 años eran típicos de esta zona, pero que hoy ya no es fácil encontrarlos en los ríos, esteros, ni en las playas.
Por último, y ante la crisis que están atravesando, el representante de los pescadores dijo no pensar en otra cosa más que en pedir a los gobiernos que pongan más atención en el tema de la contaminación, que sancionen a las empresas responsables del exterminio de especies y que destinen más apoyos para este sector, el cual ha permanecido prácticamente olvidado por las autoridades locales.
