18 de Octubre de 2024
Director Editorial Lic. Rafael Melendez | Director General - Dr. Rubén Pabello Rojas

Coatzacoalcos-Tienen trampas en lugar de calles

 

Esta situación se ha convertido en un grave problema vial, ya que es el causante de múltiples accidentes automovilísticos, temiendo aún más quienes viven en las esquinas, ya que es el lugar donde suelen incrustarse los conductores, con el fin de librarse de los enormes hoyancos.

Este sector cada vez se hunde más en la marginación, pese a que anteriormente era un sector aparentemente privado, donde sus residentes gozaban de todos los servicios domésticos, pero hoy en día éstos no logran abastecerlos.

Por otro lado, la problemática de delincuencia sigue siendo el pan de cada día, registrándose robos a casa-habitación, de vehículos y riñas que ponen en riesgo la integridad de los habitantes, por lo que exigen a las autoridades mayor vigilancia, principalmente durante las noches, cuando la zona suele ser punto de reunión de pandilleros y maleantes.

 

CALLES PELIGROSAS

El transitar por la única calle principal del sector es todo una odisea para los conductores, tener que librar enormes hoyancos, grietas enormes, invadir el carril contrario para no dañar la unidad y evitar a toda costa caer a los socavamientos que personal de la pasada administración dejó en el lugar, es causante de accidentes viales.

Residentes aseguran que no es viable caminar sobre las banquetas, porque los conductores, algunos sin falta de cultura vial, transitan a exceso de velocidad sin percatarse a tiempo de los daños sobre el asfalto y al intentar esquivarlos terminan subiéndose a las banquetas o las viviendas cercanas.

“Como es la única calle principal los vecinos tenemos que tomar el riesgo de caminar por las banquetas, es peligroso, porque hasta de día hay accidentes, este problema ya se expuso a las autoridades, pero hasta el momento seguimos sufriendo por la falta de mantenimiento a nuestras calles”, dijo.

Aseguró que desde noviembre pasado acudió personal de dicha administración y comenzaron con las labores de mantenimiento, rompiendo gran parte del asfalto del carril principal, obra que quedó varada.

“Nos habían dicho que terminarían en aproximadamente dos semanas, pero sólo llegaron tres días, rompieron, dejaron un desastre y se fueron, ya vamos para casi tres meses y la calle está peor que nunca, porque hay caos vial, nadie respeta las pocas señales que hay y como siempre los más afectados somos los peatones”, reiteró.

Para los vecinos este problema se ha convertido en temor para muchos, debido a que los conductores del transporte urbano, única ruta que transita por el lugar, no respetan los pocos señalamientos existentes y que por sus prisas en último momento logran percatarse de los daños en el asfalto, situación que provoca embotellamientos y hasta discusiones entre conductores.

“Quienes menos respetan son los conductores del transporte urbano, a veces por sus prisas invaden el otro carril y dañan las unidades que están estacionadas o los que intentan salir de la calle, se vuelve un caos vial y nos preocupa, más que nada por los niños que caminan por este lugar”, dijo.

La falta de educación vial queda expuesta en todo momento, por un lado conductores del servicio de transporte y por otro los propios residentes, quienes a sabiendas de los daños que hay en la calle y la necesidad de invadir el otro carril, dejan estacionados sus vehículos en lugares prohibidos, por lo que las unidades quedan dañadas y posteriormente hay discusiones entre los afectados.

 

NOCHES INTRANQUILAS

Para los habitantes del sector es imposible dormir tranquilos durante las noches, el ruido de automóviles, choques y demás se ha convertido en un  factor atemorizante, siendo la causa de este problema la deficiencia del servicio de alumbrado público, y es que la falta de mantenimiento, robo de materiales, como el cableado y lámparas, el paso del tiempo y factores climáticos causan estragos dejando al sector en penumbras.

“Si en el día no se ven los daños, menos en las noches, a cada rato hay accidentes, y quienes tenemos más miedo somos los que vivimos justo a la orilla de las banquetas, siempre se incrustan los conductores”, reiteró.

Además, lidiar con pandilleros y delincuentes es otra situación que intranquiliza a los habitantes y es que a ciertas horas las viviendas abandonadas, lotes baldíos y calles oscuras se convierten en su punto de reunión, y aunque las patrullas transitan por el lugar, los residentes piden que la vigilancia se aplique en las vías alternas.

“Sólo pasan por la calle principal, pero nunca entran a las otras calles, es ahí donde se reúnen los pandilleros, causan daños, roban a la gente, ya ni los comercios se salvan, ni siquiera la gente que va llegando a sus casas”, expuso.

Entre los delitos más comunes están el robo a casa-habitación, el cual incrementó durante diciembre, robo de materiales, riñas y agresiones contra transeúntes, hechos que incluso se registraban en plena luz del día.

La falta de un centro recreativo en el lugar obliga a los menores de edad a jugar en calles y banquetas, lo que representa un riesgo para ellos, debido a la presencia de pandilleros en la zona.

“Este sector supuestamente iba a ser privado, pero a raíz de que se pavimentó la calle principal que comunica con otras colonias, empezaron los problemas, robos, accidentes, y lo que realmente se necesita es que las autoridades nos favorezcan con más servicios, queremos vivir tranquilos y no con miedo”, reiteró.

 

Exigen más señalamientos, seguridad vial, reparación de las luminarias y principalmente la conclusión a las obras de su calle principal, proyecto que quedó varado desde noviembre pasado.