* Nueva manifestación de habitantes de comunidades por trabajos de gasoducto
* Defenderán su postura a pesar de no ser apoyados por el gobierno local
José Miguel Bautista Hernández
En una historia sin fin se ha convertido la oposición al gasoducto que atraviesa las comunidades del municipio de San Rafael, ahora con una nueva manifestación en la comunidad Potrero Nuevo donde decenas de ciudadanos salieron a la carretera principal a manifestarse y detener las obras de este entubamiento que ya está en una fase avanzada.
Según relata Mario Gutiérrez García, las congregaciones afectadas serían Potrero Nuevo, Sementeras y Tepetates, aun cuando según la ciudadanía aseguran que la misma Noemí Guzmán Lagunes, directora de Protección Civil Estatal ha declarado en un dictamen que dicha obra no cuenta con las medidas de protección necesarias, haciéndose de oídos sordos tanto la empresa petrolera como las autoridades municipales.
Miedo, pero sobre todo un rechazo rotundo es lo que habitantes de estas comunidades externaron durante la manifestación, ya que dichas obras están cercanas a escuelas, iglesias y centros deportivos, situaciones que se deben de proteger, pues los afectados serían los más pequeños ya que aun cuando las autoridades se han empeñado por mostrar otra realidad, los materiales utilizados son explosivos y sobre todo construidos en zonas inundables.
Alzaron la voz para decir que no están en contra del progreso o empresas pero que requieren un reajuste de los trazos en estas tuberías por las zonas parcelarias, y con líneas seguras, no con tubos que son claramente visibles a ras de suelo, lamentablemente manifestaron que Héctor Lagunes Reyes no les ha dado audiencia, a pesar de que durante su campaña manifestó que dicha obra no se construiría.
La obra presenta un avance de casi el 60 por ciento las demás comunidades también señalan descontento a dichas obras, señalan que según sus conocimientos se reportó 1 millón y medio de pesos a las arcas del ayuntamiento y se anunció que serían para invertir en obra pública, la cual no pueden negar que se estén realizando, pero consideran que es una forma de tratar de tranquilizar a los grupos opositores, aun así aseguran que con esas obras no les quitarán el temor de que con la obra del gasoducto sus vidas están en riesgo.
Aunque relativamente se ha sentido el apoyo de todas las comunidades a este gasoducto, fueron un número simbólico de manifestantes los que se plantaron en las obras de construcción todos ya han dado sus firmas, levantando gran cantidad que ya han sido enviadas a las diferentes secretarías involucradas, y aun cuando poco a poco se ha incrementado la inconformidad se llegaría hasta el final en esta problemática.
Pidieron comprensión y conciencia de la ciudadanía, así como de los empresarios, ya que ellos no quieren detener el progreso, si no piden seguridad para ellos y sus familias, pues son los habitantes de las comunidades los que están en riesgo, defendiendo su seguridad reubicando el paso del gasoducto en zonas no habitables para finiquitar el problema o de lo contrario la inconformidad y el descontento seguirían hasta obtener respuestas.
