Rodrigo Barranco Déctor/Boca del Río.- El presidente de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), Jaime Rochín del Rincón, dijo que las cifras de delitos como extorción y homicidio son alarmantes y "son inadmisibles para una nación que aspira a vivir en paz y con justicia".
Durante la inauguración del quinto Foro Regional para elaborar Programa de Atención Integral a Víctimas, en Boca del Río, se informó que datos oficiales, de enero a julio de este año, se han reportado 979 secuestros a nivel nacional, 163 secuestros al mes, esto significa que al día cinco personas son secuestradas en el país.
El funcionario indicó que en el primer semestre del año se registraron 3 mil 635 extorsiones, 605 por mes, veinte extorsiones diarias. El Distrito Federal, el Estado de México y Jalisco son los lugares donde más se presenta el delito.
Sobre los casos de homicidios dolosos se tiene un total de 9 mil 49 casos, lo que equivale a mil 508 homicidios por mes, o cincuenta homicidios dolosos diarios.
"Esta realidad nos sacude, nos obliga a evaluar lo realizado en estos primeros siete meses de trabajo de la Comisión. Hoy más que nunca sabemos que el esfuerzo no alcanza aún, hoy con más datos sabemos que nos falta mucho por hacer, pero sobre todo, mucho por cumplir", dijo.
Arrancan trabajos
Con un llamado a emprender acciones coordinadas para recuperar el clima de paz y tranquilidad en el país y ofrecer de manera paralela una protección integral a todas las víctimas, el Presidente de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), Jaime Rochín del Rincón, inauguró los trabajos del quinto Foro Regional para elaborar el Programa de Nacional de Atención Integral a Víctimas.
Rochín del Rincón destacó que ante el escenario de inseguridad que hoy vive México es urgente recuperar las libertades perdidas por miedo a la violencia y a la inseguridad que nos acecha.
“Estos foros nos han reunido por primera vez en la historia de este país para recoger lo que, sin duda, representa una genuina expresión de preocupación, de dolor, de tristeza, pero vinculada a un esfuerzo por pasar del abandono y la desesperanza, a la articulación viva y real que permita encontrar respuestas en favor de las miles de víctimas, que las protejan y aseguren su derecho a la justicia, a la verdad, al trato digno, a la reparación integral.”
