Yasmín Mariche/Veracruz.- Ambulantes de la zona cero expresaron que tienen la sospecha de que existen infiltrados que propician los desmanes entre las fuerzas del orden público y los vendedores durante los operativos que se efectúan para removerlos.
Durante una reunión con el alcalde de Veracruz, Ramón Poo Gil se atendieron sus demandas de respeto y de no agresión durante las tareas de ordenamiento que se efectúan debido a que no se han cumplido los acuerdos establecidos entre ambas partes, en los que los vendedores accedieron a no trabajar en de Juan Soto y Miguel Hidalgo.
“Siento que sí hay gente moviendo a los vendedores para que hagan todos esos desmanes, porque no les conviene que los quiten de vender ahí, comentan que algunas personas se están mochando para que no los quiten” externó una de las vendedoras.
Ramón Poo comentó que iniciarán investigaciones para determinar quienes están efectuando las “mochadas” para que se generen hechos violentos durante los operativos que realiza el municipio con apoyo de la policía naval y la marina.
Los ambulantes reunidos con el munícipe refirieron que algunos líderes se ven beneficiados con los conflictos generados durante la reubicación de vendedores, ya que pese a los acuerdos firmados no pretenden moverse de la zona cero.
El alcalde porteño aclaró ante ellos que el operativo no era de desalojo, sino que era una acción preventiva para evitar que se instalaran nuevamente en el lugar.
En cuatro años, comercio en orden
El munícipe veracruzano, expresó ante los ambulantes y vendedores semifijos de la zona de mercados que la intensión que tiene es trabajar a lo largo de cuatro años para que todo el comercio informal pueda estar en orden y debidamente reglamentado.
Acotó que este trabajo será posible, si autoridades municipales y comercio informal acceden generar proyectos y alternativas para que esto ocurra así.
Poo adelantó que tiene prevista la implementación de espacios especialmente destinados para la reubicación de quienes hoy se encuentran trabajando en las calles del puerto de Veracruz.
“No es un proyecto de seis meses, pero va a ser un proceso de cuatro años. Todo depende de lo que logremos acordar nosotros. Todo depende de que se respete todo lo que se va poniendo sobre la mesa”, expresó.