La disputa entre dos grupos de obreros terminó con la colocación de la bandera de huelga
Rodrigo Barranco Déctor
Veracruz
Trabajadores de la fábrica de tubos Tenaris-Tamsa colocaron las banderas rojinegras en señal de huelga, tras disputas en el interior del sindicato que opera en la planta, ubicada en la ciudad de Veracruz.
Cerca de las 15:00 horas, de ayer martes 16 de julio, el conflicto gremial ocasionó que se detuvieran las actividades en la factoría de tubos petroleros más grande del mundo, y una de las fuentes más importantes de trabajo en el Puerto de Veracruz.
Todo empezó cuando el dirigente sindical Pascual Lagunes fue detenido en mayo del 2017, señalado de participar en una pelea con disidentes que dejó, al menos, dos personas muertas y un reportero lesionado de bala.
A su salida, en marzo del 2019, el todavía líder se topó con que ya había otro grupo con el poder de la organización y que era encabezada por su ex socio, Cándido Canseco.
Ese mismo mes, ambos bandos realizaron reuniones con la base trabajadora para proclamarse como auténticos dirigentes sindicales.
Después, tanto las autoridades laborales como la directiva de Tamsa reconocieron a Canseco como el nuevo representante de los obreros, generando el actual conflicto.
Según testigos, Pascual Lagunes y un grupo de 50 personas irrumpió este martes al estacionamiento de la fábrica para tratar de apoderarse de la planta, pero fueron repelidos por los integrantes del turno que operaba en ese momento.
Luego de gritos y rechiflas, los trabajadores en funciones colgaron las banderas rojo y negras para obligar a las autoridades del Trabajo a que acudan a la fábrica y definan quién encabeza la planta.
