Sin embargo, uniformados de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado les impidieron el paso justo en la esquina del zócalo con Zaragoza, lo que derivó en una trifulca.
Los supuestos profesores tomaron las sillas de plástico y madera de los restaurantes de Los Portales y los lanzaron en contra de los policías quienes repelieron la agresión usando sus escudos.
Tras varios minutos de jaloneo ambas partes tomaron un descanso aunque fue aprovechado por los líderes magisteriales para lanzar insultos en contra de los granaderos y de los Infantes de Marina, ayudados de un megáfono.
“Cobardes”, “sólo están sentados”, eran algunas de las cosas que gritaba uno de los que encabezaba la manifestación hasta que los uniformados comenzaron a avanzar en formación lo que derivó en un nuevo enfrentamiento.
A diferencia del primer choque, los militantes de Morena huyeron y los maestros no sólo lanzaron de nuevo sillas y mesas, también arrojaron petardos que reventaron cerca del área de restaurantes de los Portales.
La gresca duró varios minutos y se intensificó cuando llegaron personas a agredir a los policías con piedras y las tapas de las alcantarillas del zócalo porteño.
Los granaderos siguieron avanzando hasta llevarlos a la Plaza de la Constitución donde se esparcieron hasta que los ánimos se calmaron.
Los manifestantes fueron a la avenida Independencia para seguir gritando consignas a la hora del desfile conmemorativo del 21 de Abril sin causar ya más desmanes.