Acusan pescadores.
Rodrigo Barranco Déctor
Alvarado
Pescadores y prestadores de servicios de la localidad de Antón Lizardo, en Alvarado declararon que es imposible que la guardia de la Heroica Escuela Naval, donde viven los almirantes de la Secretaría de Marina-Armada de México, no se dieran cuenta de la fiesta que personas realizaron en la Isla de Salmedina, en agosto de este año.
Pidiendo reserva de sus nombres, para evitarse problemas, los trabajadores del mar relataron que son los mismos efectivos de esa institución los que se presume se encargan en cuidar la zona junto a personal de la Procuraduría Federal del Medio Ambiente.
Sin embargo, el día del festejo no hicieron nada por frenar el daño que hubo en el entorno y que obligó a las autoridades federales a cerrar Salmedina y la Isla de en Medio al público, lo que ha generado afectaciones a la economía local.
En un recorrido realizado en el límite de playa que corresponde ya a las instalaciones navales, son visibles las dos islas, similar a la nitidez con que se vislumbra la de Sacrificios desde la avenida Juan Pablo II, en Boca del Río.
Los pescadores, lancheros y restauranteros aseguran que del nuevo muelle de la escuela al centro de la fiesta hay unos ocho kilómetros de distancia, por lo que debieron ver, por lo menos, los fuegos pirotécnicos que fueron arrojados ese día, según consta en boletines redactados por Profepa.
En agosto, usuarios de redes sociales dieron a conocer un vídeo donde se ve a varias personas en una fiesta realizada en Salmedina, isla que forma parte del Parque Nacional Sistema Arrecifal Veracruzano, un área natural protegida.
Tras la presión de la opinión pública, Profepa determinó cerrar el paso a visitantes en esos lugares y sancionar al organizador con una multa de 4 millones de pesos.
La autoridad federal determinó que los asistentes afectaron el entorno, dañaron y manipularon nidos de tortuga violando las leyes ambientales.
A pesar de eso, los elementos de la Marina-Armada de México no reportaron ni hicieron nada por impedir la fiesta, pese a que los Infantes son los que acompañan los patrullajes de la Procuraduría, cuando salen a hacer rondines.
