Esperan que a finales de noviembre abran la Isla de en Medio.
Rodrigo Barranco Déctor
Alvarado
Cerca de 300 familias de la localidad de Antón Lizardo están casi en la ruina debido al cierre de las islas Salmedina y de en Medio, en agosto, tras una fiesta en donde invitados dañaron nidos de de tortuga y el entorno ecológico.
Eusebio Cardoza Mundo, uno de los afectados dijo que la mayoría son pescadores que usaban sus lanchas, los fines de semana, para sacar un recurso extra llevando a los turistas a dar recorridos por las islas.
Sin embargo, afirmó que tras el cierre impuesto por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, pierden entre 200 y mil pesos diarios, lo que ha lesionado sus bolsillos.
Además, señaló que no son los únicos afectados, también los restaurantes de mariscos pues antes las personas que viajaban en las lanchas regresaban a comer.
Es por eso que consideran poco la multa de 4 millones de pesos que la Profepa impuso a los responsables de la fiesta en Salmedina.
"Tenemos pérdidas, porque no podemos llevarlos y si los llevamos no nos dejan que nos arrimemos ahí. Tenemos que estar 10 metros de la orilla y no dejan que estemos ahí. Nosotros llegábamos, nos parábamos ahí y se bajaban los turistas", dijo Cardoza.
Los afectados lamentaron que la Profepa ponga esa multa, pero no les ayuden a solventar las pérdidas que han tenido en estos 80 días, por lo que hicieron el reclamo a la Federación para que les ayude.
Por otro lado, personal de la Profepa acudió al lugar para poner instrucciones sobre el uso adecuado de las islas.
Los pescadores aseguran que les dijeron que la Isla de en Medio quedará abierta antes del 30 de noviembre, sin embargo, esto no es oficial todavía.
