Reconocen muertes por huachicoleo.
JOSÉ JUAN GARCÍA/AVC
VERACRUZ
El director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), Carlos Alberto Treviño Medina, informó que los estados de Puebla, Hidalgo, Guanajuato, Veracruz y Jalisco concentran el mayor número de tomas clandestinas de combustible en el país.
Al comparecer ante la Cámara de Diputados con motivo de la Glosa del VI Informe de Gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, el funcionario federal reconoció ante los legisladores federales que el número de tomas clandestinas en el país se incrementó en un 262 por ciento en el sexenio que está por concluir, pero consideró que el volumen de hidrocarburo robado no aumentó.
Según Treviño, el número de tomas clandestinas detectadas en el sexenio fue de aproximadamente 40 mil.
No obstante, Treviño Medina admitió que el mayor número de tomas clandestinas se detectó este año.
“Las entidades que más tomas tienen, estas son, en el 2018, este rango de posiciones cambia, pero en el 2018 es Puebla, Hidalgo, Guanajuato, Veracruz y Jalisco, esas son las primeras cinco entidades y en cuanto a los municipios que más han registrado en el 2018 son San Martín Texmelucan, Atlacomulco de Zúñiga en Jalisco; Cuautepec de Hinojosa en Hidalgo; González en Tamaulipas y Tula de Allende en Hidalgo”, subrayó.
Carlos Alberto Treviño Medina dijo que Pemex presentó nueve mil 394 denuncias por robo de combustible en este año.
El director general de Pemex aseguró que se despidió a más de 40 de sus trabajadores al descubrirse que participaban en el robo de combustible.
Además, se logró la detención de mil 600 personas a nivel nacional, de las cuales fueron a juicio mil 024 y solo se obtuvo prisión preventiva para 189.
El funcionario federal manifestó que el delito de robo de combustible aumentó en el país principalmente por la participación de grupos del crimen organizado.
Durante su intervención, Treviño Medina reconoció que un trabajador de Pemex perdió la vida en el municipio de Tres Valles luego de que personal de Seguridad Física fuera sorprendido, por un comando armado que iba a bordo de siete camionetas, cuando se aseguraba una pipa hechiza cargada con cerca de 31 mil litros de hidrocarburo.
