“Nos da pena, queremos que venga la gente a hacer el gasto, que vengan los turistas y ya no digamos, por lo menos las personas que están en Veracruz, que vengan a gastar su dinero al centro y mire como los recibimos, con estos espectáculos tan deplorables; es triste”, dijo un comerciante establecido en la calle de Francisco Canal.
Incluso, la maceta, el árbol, la caseta telefónica y hasta la basura, con unas auténticas barreras que en ocasiones, son imposibles de librar, por las personas que caminan por este crucero. En más de una ocasión, se han presentado tropezones o caídas, de personas, sobre todo de la tercera edad, que se han accidentado en este sitio.
Basta mencionar, que este problema; cumplió más de un año, sin que ninguna autoridad municipal, intente resolverlo, “van y vienen, y no les interesamos, casi que es parte de la ciudad, ya ni nos causa molestia; son de las cosas que no entendemos de nuestros gobiernos, hasta que no pase un accidente grave o se caigan otras personas”, comentó un comerciante establecido en el callejón Reforma.
Y agregó: “Hace como dos meses, se tropezó un niño que lo llevaban a la escuela, se rompió hasta su pantaloncito, y claro que se raspó y le salió sangrita de su rodillita; hece más de un año, una señora que llevaba su bolsa del mandado para el mercado, muy tempranito , por cierto; también se cayó, son unas trampas mortales”, refirió.
El callejón Reforma, es uno de los pasajes históricos de la ciudad de Veracruz, incluso en la nomenclatura ubicada en este crucero que forma con la calle de Francisco Canal, se puede leer en la placa, la leyenda que dice: “En la segunda mitad del Siglo XIX, esta calle se llamó Segunda Punta de Diamante”.