Andrés Salomón Pérez
Veracruz
Alrededor de 60 trabajadores de la empresa Covintec, dedicada a la elaboración de paneles para la construcción, demandaron al Gobierno estatal, y ahora buscan apoyo para que los reinstalen o al menos los liquiden conforme a la ley, afirmó Jorge del Rivero Medina, apoderado legal de los trabajadores.
“Los hechos ocurrieron el lunes; al regresar a sus labores, alrededor de 60 obreros se encontraron con la sorpresa de que la empresa cerró, y dos policías de seguridad privada no les permitieron entrar, y los patrones tampoco quieren dar la cara”.
Del Rivero Medina denunció que el Sindicato Nacional de Trabajadores Azucareros es propietario de esta empresa, la cual se encuentra ubicada en el parque industrial de Veracruz desde hace más de tres décadas y jamás había ocurrido una situación similar.
“En este momento hay el rumor de que se quieren llevar la factoría a otro sitio; sin embargo, no sabemos si dentro de la entidad o hacia algún punto de la República; lo que sí es un hecho es que quiere deslindarse de los trabajadores sin ninguna responsabilidad legal”.
Asimismo, señaló que más de 50 familias están en la incertidumbre, al explicar que desconocen el motivo por el cual la empresa para la que trabajaban cerró de manera inmediata el pasado lunes, y hasta hoy desconocen el futuro de la factoría.
“Es increíble que un sindicato que se dedique a defender a trabajadores de otros patrones, y ahora en este caso sea el patrón quien resulta que está impidiéndoles trabajar, dejándolos en la calle; imagínense a estas personas qué le dicen a sus familias”.
El representante de los afectados manifestó que los obreros están en la mejor disposición de entablar un diálogo y llegar a un acuerdo.
“En esta semana acudiremos a la Ciudad de México para pedir una explicación al director de la factoría, pero de no haber una respuesta satisfactoria, se daría paso a interponer un juicio laboral para exigir a la empresa que cumpla”.
Finalmente, dijo que hay trabajadores con más de 30 años de antigüedad, los cuales laboraban en distintas actividades.
“No se vale que privilegiando una política de trabajo y que se hable de que en el puerto hay trabajo, se cierre una empresa altamente productiva, porque ni siquiera está en quiebra”.