La impunidad y omisión, los factores clave.
Iris Román
Tuxpan
A pesar de los esfuerzos por capacitar a los cuerpos policiacos en derechos humanos, la impunidad y la falta de consecuencias siguen siendo los principales factores que perpetúan las violaciones en esta materia. Según el delegado regional de Derechos Humanos, José Luis Hernández, de las 103 quejas recibidas en lo que va de 2024, la mayoría están dirigidas contra elementos de las corporaciones policiacas.
Hernández explicó que, aunque los policías reciben constante capacitación y conocen perfectamente los límites de su función, las quejas por maltratos, uso excesivo de la fuerza y detenciones arbitrarias no han disminuido. "No es que no sepan lo que hacen, están conscientes de que violan derechos humanos, pero si no hay consecuencias, esto seguirá ocurriendo", afirmó.
El delegado destacó que muchos elementos cuentan con formación profesional y diversos cursos, lo que debería reflejarse en un actuar más ético. Sin embargo, la falta de sanciones ejemplares fomenta un círculo de impunidad que afecta la confianza de la ciudadanía.
"El problema no es la capacitación; es el sistema. Mientras no haya consecuencias claras y contundentes para quienes vulneran derechos, estas prácticas seguirán", añadió Hernández.
El funcionario hizo un llamado a las autoridades para fortalecer los mecanismos de rendición de cuentas y garantizar investigaciones efectivas ante las quejas ciudadanas. Asimismo, invitó a la población a seguir denunciando cualquier abuso, ya que esto es clave para erradicar estas violaciones y mejorar las condiciones de respeto hacia los derechos humanos en la región.