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El Gobierno Federal asignará 25 mil 12.6 millones de pesos en 2025 para los proyectos ferroviarios del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), una iniciativa impulsada originalmente por el expresidente Andrés Manuel López Obrador.
De acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de Egresos para el próximo año, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) contempla una inversión de 13 mil 169 millones de pesos para la rehabilitación, modernización y suministros en la Línea K, que abarca del kilómetro 0+000 al kilómetro 447+286.
Adicionalmente, el Gobierno encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo etiquetó más de 5 mil 840 millones de pesos para trabajos similares en la Línea F, destinados a su rehabilitación integral y modernización.
Otro rubro importante del presupuesto es una inversión de 3 mil 48 millones de pesos para la corrección de curvatura y pendientes, además de la conexión ferroviaria al puerto de Salina Cruz en la Línea Z.
IMPACTO EN EL DESARROLLO REGIONAL
Según estimaciones del Gobierno Federal, el Corredor Interoceánico generará 550 mil empleos directos desde su inicio hasta 2050, con una meta intermedia de 150 mil empleos para 2030, principalmente en sectores como la construcción, logística, petroquímica, agroindustria, transporte ferroviario y portuario.
Actualmente, se trabaja en la construcción de una plataforma logística que facilite el tráfico de contenedores entre el Océano Pacífico y el Golfo de México, un punto estratégico que busca atraer inversiones nacionales y extranjeras.
JUSTIFICACIÓN DEL PROYECTO
El gobierno argumenta que la planificación y ejecución de proyectos en el ámbito ferroviario y de transporte multimodal son estrategias clave para el desarrollo regional. En línea con los compromisos de la administración actual, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) tiene como prioridad fomentar la infraestructura ferroviaria y el desarrollo tecnológico como pilares del progreso nacional.
Los 25 mil millones de pesos asignados incluyen recursos propios y fiscales, y estarán destinados a obras como la rehabilitación de las líneas K, F y Z, así como a otros proyectos asociados al desarrollo del Corredor Interoceánico. Este presupuesto refleja el compromiso del gobierno con la consolidación de este corredor como un motor de desarrollo económico para el sureste del país.